Las resinas compuestas modernas pueden encontrarse en una variedad de tonos, lo que permite al odontólogo utilizar diferentes técnicas incrementales con diferentes tipos de resinas compuestas, como para lograr óptimos resultados clínicos.

Hacia el final de los años '90, los fabricantes de resinas compuestas comenzaron a mejorar las propiedades ópticas de sus materiales cuando éstos se empezaron a fabricar en un mayor rango de tonalidades, tanto de esmalte como de dentina, siempre esforzándose en proporcionar propiedades ópticas similares a las del diente natural.

Sin embargo, tal variedad de tonalidades puede volver difícil para el odontólogo efectuar una selección de tonos precisa durante el procedimiento restaurador. Tomando en cuenta que éste es un factor crucial para restauraciones de aspecto natural, es fundamental para el profesional comprender las tres dimensiones básicas del color y cómo se relacionan con el aspecto del diente.

Básicamente, MATIZ (o tinte), SATURACIÓN (o intensidad/croma) y LUMINOSIDAD (o valor) son las tres dimensiones que los odontólogos deberían tener en mente cuando seleccionen composites para restauraciones anteriores, pero es importante “traducir” esos términos a lo que significan clínicamente.

Hablando ópticamente, la dentina es la estructura semi-opaca, y es responsable por el tinte (matiz) de un diente. En la dentición natural, la dentina presenta también una gran variación de saturación (o intensidad) desde la región cervical a la incisal. En otras palabras, percibimos más color en la región cervical y a medida que miramos hacia la región incisal, este color se va atenuando gradualmente. Podemos decir que la región cervical tiene más color, presentando mayor intensidad. El diente pierde la saturación del color y gana translucidez hacia la región incisal, a medida que la dentina se vuelve más delgada y el esmalte más espeso. Dicho esto, el color (tinte) del diente viene de la dentina y se percibe a través de la capa translúcida de esmalte.

Como la propiedad óptica relacionada con la translucidez es la que tiene mayor impacto cuando se analiza la estructura dental, es fundamental comprender cómo el esmalte natural modifica el aspecto cromático del diente para que nosotros comprendamos  la última dimensión del color: luminosidad (o valor): a medida que la luz pasa a través del esmalte, los cristales de hidroxiapatita actúan como prismas, dispersando y desperdigando los rayos de luz, lo que nos permite percibir cuánta luz pasa a través del esmalte  y cuánta luz es reflejada por el mismo. En casos donde se refleja mucha luz, el esmalte se percibe como más blanco, más reflectivo, y debido a ello es llamado esmalte de alta luminosidad (o alto valor). Por otra parte, en casos donde el esmalte es más translúcido, su estructura permite mayor pasaje de luz, la cual puede ser absorbida por la dentina, de modo que hay menos luz siendo reflejada por el diente. La disminución de la cantidad de luz reflejada desde el diente proporciona un aspecto más grisáceo (baja luminosidad) al diente.

Dientes creados en resina Amelogen plus con el mismo interior de Dentina A3.5,

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Ultradent ofrece 3 opciones de materiales restauradores que permiten propiedades ópticas ideales para diferentes tipos de restauraciones: FORMA, Vit-l-escence, y Amelogen plus.

El Dr. Rafael Beolchi es odontólogo graduado por la Universidade de São Paulo (USP), con Maestría en Biomateriales (Tecnología Nuclear) en el Instituto de Pesquisas Energéticas e Nucleares (IPEN-USP). Es profesor invitado en el curso de Post-Grado de la universidad São Leopoldo Mandic en Campinas, Brasil, autor de artículos clínicos, científicos y de capítulos de libros sobre los temas de materiales odontológicos, restauraciones estéticas directas, aclaramiento y fotopolimerizacióny, y ha conducido cursos y conferencias sobre estos temas en Brasil, Latinoamérica, Estados Unidos, Europa, Asia y Africa.